Los tejidos a partir de fibra de carbono son géneros resistentes que se usan en la cubierta, fabricación y refuerzo de productos de todo tipo, especialmente en materia de seguridad y protección de la integridad física de personas.
La tela fibra de carbono posee un uso muy difundido ya que es una vestimenta de cuerpos de seguridad y militar, en cuyo ámbito se requiere de un material de alta resistencia a los impactos y la tracción, así como al desgaste por el tipo de trabajo: roces, abrasión, fricción, choques, entre otros. Su uso más regular es en el campo de la seguridad industrial.
Así como surgieron y en su momento se hicieron populares el Kevlar y la aramida, la industria de la seguridad ha venido llevando a cabo investigaciones en el desarrollo de otros tejidos de propiedades similares con los cuales se cubran diseños específicos dentro de esta área.
La tela de carbono se fabrica a partir de fibras de carbono y un compuesto, en este caso aramida, porque debe ser una aleación con otro material cuya capacidad de protección dentro del ámbito de la seguridad industrial sea de trayectoria. Generalmente, los compuestos son hechos con Kevlar o Aramida, no obstante, se están comenzando a realizar aleaciones con materiales más recientes en el campo de las poliamidas.
El más difundido es el compuesto Carbono-Kevlar, con el cual se han obtenido excelentes resultados, la calidad del producto es superior a los que ya acaparaban el mercado. La mezcla entre la resistencia mecánica de la aramida y la resistencia y disipación térmica del carbono ha dado grandes avances en la seguridad y el diseño de piezas para la protección.
Las fibras de carbono se entretejen con fibras del Kevlar para superponer resistencia al género. Gracias a los adelantos de la industria, los tejidos pueden ser elaborados y presentados en varios tipos de textiles de acuerdo a su textura: hasta ahora se han desarrollado con éxito tipo sarja (sarga) y raso turco. El estampado de la tela no obedece a fines estéticos, como se pudiera creer, sino que le otorga mayor estabilidad dimensional y maleabilidad al tejido.
Las telas de seguridad son usadas en diversas industrias con fines de seguridad física.
Por ejemplo:
En las fábricas y empresas manufactureras, las plantas usan los tejidos de carbono-Kevlar en mantas de enfriamiento controlado de metales, cortinas para mantenimiento y cabinas de soldadura, ya que ofrece alta resistencia ignífuga (contra chispas de soldadura, chispas por roce del metal). También son utilizados en la confección de equipos de protección industrial, como blusones, pantalones, delantales, guantes, balaclavas térmicas, capuchas, mangotes (guantes térmicos largos), entre otros.
Su aplicación más reciente es en la manufactura de ropa interior térmica para zonas de clima invernal y se ha incrementado su inclusión en prendas térmicas para deportistas de disciplinas como el ciclismo, motocross, carreras de autos y maratones.
Son hechas para enfrentar temperaturas muy bajas -menos de 5°C– o muy altas ya que aíslan las condiciones del clima exterior, de esta manera el deportista no dispersar energías ni para calentar el cuerpo ni para liberarlo del calor. Además se usa en placas dentro de la ropa para absorber vibración e impacto. Entre otras bondades, el hilo de carbono aísla la electricidad estática causada por el roce de tejidos.
Por otra parte, están los géneros fabricados para el recubrimiento de artículos y uso general, como aquellos elaborados en forma de mats, tafetanes y carbonos biaxiales para que los clientes realicen sus propias piezas, bien sea para confección de prendas de vestir de protección individual o para combinar con todo tipo de resinas (epoxis, uretanos, acrílicas, viniléster), manualmente, por infusión embebiendo la tela o mediante contacto a mano, infusión o transferencia de resina RTM en la elaboración de piezas de carbono y moldes.
Características de la tela de carbono
Su resistencia mecánica y térmica, principalmente, la hacen favorita por encima de compuestos de más data en el mercado. De acuerdo a la cantidad de capas que se usen del tejido, aíslan hasta 350°C de calor, propiedad con un alto valor para ciertos tipos de industrias y para equipos de protección individual. Mientras que las aramidas, meta-aramidas y otras poliamidas ofrecen alta resistencia al corte y la abrasión, la fibra de carbono se destaca por ser excelente aislante térmico.
El carbono también es resistente a la fricción, intemperie y otros factores, pero se destaca aun más por el aislamiento térmico. Las meta-aramidas son buenas en cuanto a aislamiento térmico, pero el carbono resiste mayor temperatura: ThermoCarbon protege hasta 350°C, el Nomex hasta 300°C, 450°C en uso controlado, pero requiere un estrictísimo control y supervisión que se traduce en una inversión mayor de horas hombres en su uso a tales temperaturas para evitar riesgos a la integridad física.
La maleabilidad del producto para la confección de equipos de protección ofrece confort en el uso por parte del trabajador y presenta una menor fricción, rigidez o aspereza al tacto. Posee características químico-constructivas ideales que permite limpiar las prendas mediante proceso de lavado industrial, sin que pierdan propiedades protectoras. El costo de los productos, aunque elevado, se ve como una muy buena inversión porque el tejido es resistente y duradero en el tiempo, es decir, su reutilización no conlleva merma de cualidades.
Dónde comprar tela de carbono
En la red hay mucha información respecto a ventas de telas de carbono de parte de fabricantes y distribuidores de renombre. Están las páginas que distribuyen el producto, las cuales le brindan las características de cada producto para que pueda elegir el que más se adapte a sus necesidades, bien sea para la elaboración de piezas o la adquisición de equipos de protección individual de corte industrial.
En Europa y América hay empresas de dilatada trayectoria en el campo de la investigación y desarrollo de productos de carbono que ofrecen asesoría sobre sus artículos y ventas al mayor y detal. Elija aquellas compañías que sean amplia-mente reconocidas en el ámbito y puedan ofrecerle una consultoría integral sobre lo que proveen y se interesen acerca de sus requerimientos.
En este rubro de los productos a base de carbono, no aplican las compras en páginas populares de compra y venta, salvo que se trate de otro artículo de carbono que no sean textiles, o telas incluidas en kits de reparaciones, pues en cuanto a las telas de carbono por cantidades (rollos) o hilos roving, se requiere que haya un nivel de conocimiento del expendedor para informar correctamente acerca de las cualidades de su stock.
Aunado a ello, estos proveedores deben cumplir con cierta permisología, de acuerdo a la región del mundo donde operen, que les autorice a expedir productos relacionados con la seguridad y protección, así como certificaciones que avalen su calidad, pues cabe recordar que muchas de estas empresas confeccionan y venden, además de equipos de protección individual industrial, los complementos de seguridad de cuerpos del orden público y militar, entiéndase chalecos antibalas, blindajes varios y otros artículos como guantes, pasamontañas (balaclava) y uniformes.